Juan Ignacio Gutiérrez
Los profesionales de la informática utilizan el término malware o badware para referirse a distintos tipos de software o pequeños programas informáticos que contienen códigos hostiles o intrusivos, cuyo objetivo es contaminar para dañar el sistema en el que se instalan o causar un más funcionamiento. Este mal funcionamiento puede venir tanto por una pérdida o robo de datos como por una pérdida o reducción de la potencia de nuestros equipos. En el lenguaje de la calle, este tipo de software suele ser conocido como virus informático, pero, veremos que lo que llamamos virus informáticos solo constituye uno de los tipos de malware o software malintencionado. Hace unos años la principal amenaza la constituían los virus informáticos. Se les conoce como virus debido a la capacidad que estos programas tienen de reproducirse, pasando a otros ficheros y aplicaciones, necesitando para ello un huésped al que infectar, lo que podría recordarnos el comportamiento de los virus biológicos. Una vez en nuestro equipo, los “virus” comenzarían a realizar las acciones perjudiciales vinculadas a su configuración, que podrían ir desde una “gripe” para nuestro equipo, hasta una enfermedad más seria. Después aparecieron los conocidos como gusanos. Estos invasores no necesitan ya infectar a otros ficheros para reproducirse, ya que la forma que tienen de propagarse consiste en replicarse a si mismos, con el objetivo de colapsar las redes en las que se infiltran. Uno de los tipos de software malintencionado que ha ido adquiriendo en los últimos años más relevancia y protagonismo, son los conocidos como  Troyanos. Estos programas son aparentemente inofensivos pero, al igual que los soldados griegos que se habían introducido en el caballo de madera dejado a las puertas de la ciudad de Troya, tienen una misión oculta, que, generalmente, consiste en introducirse en un sistema para tratar de robar información o generar un acceso indebido o no autorizado. Entre los Troyanos podemos encontrar los llamado Backdoors (literalmente “puertas traseras”). Estos programas, buscan la creación de buscar una vía para evitar los controles de acceso, o de identificación y autenticación de usuarios, posibilitando accesos irregulares y no controlados a nuestros equipos. Otros programas del tipo conocido como troyanos serían los Keyloggers, que registran las pulsaciones en el teclado para averiguar así información privada, como contraseñas; los Stealers, que acceden inadvertidamente a en nuestro equipo para robar información almacenada el navegadores, programas de mensajería instantánea, correo electrónico u otros, o los Ransonwares, programas que buscan bloquear el acceso a la información o a los equipos, para, posteriormente, pedir una cantidad económica para que recuperemos el acceso a nuestra información o nuestros equipos. Los Spyware, que podríamos catalogar también dentro del grupo de los troyanos, tienen la misión de recopilar toda la información que puedan sobre nuestra actividad (hábitos, compras, navegación,…), para enviarla de forma inadvertida a servidores o direcciones de correo. Por último, también tendríamos que dar la consideración de malware, a los programas Adware, diseñados para mostrarnos publicidad al instalarse inadvertidamente junto a otros programas Os dejo, como siempre, algunos enlaces interesantes:
Categorías: CAJÓN DE SASTRE

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