Juan Ignacio Gutiérrez
Diremos, siguiendo a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) que las cookies se utilizan fundamentalmente para dos cosas:
  • Facilitar la navegación
  • Ofrecer publicidad basada en hábitos
La utilización de las cookies supone, en la práctica, la descarga en nuestro equipo (ordenador, tableta, móvil,…) de un pequeño archivo que almacenará, para después recuperar, datos que están en nuestro dispositivo. Dependiendo del tipo de cookie, esta descarga va a tener una incidencia más o menos importante sobre nuestra privacidad. Podemos evitar que esos pequeños programas o cookies se instalen en nuestro equipo, pero lo realmente importante es que conozcamos qué son y para que sirven, como pueden afectar a nuestra privacidad y a nuestra navegación en internet. Internet es un espacio no demasiado diferente de lo que en ocasiones llamamos mundo real. Deberíamos hacernos conscientes de que al navegar por la red, del mismo modo que al pasear por la ciudad vamos dejando rastro, y es probable que no seamos conscientes de que esto está siendo así. Al salir de casa por la mañana el ruido de nuestra puerta hace saber a los vecinos que lo hacemos. Al saludar al conserje del edificio, le estamos dando más información de la que en principio pensamos: dependiendo de como nos hayamos vestido, sabrá si vamos a trabajar; sabrá si llevamos al niño al colegio; sabrá si estamos de buen o mal humor, o si nos ha tocado sacar la basura. Y no habrá tenido que preguntarnos nada. A partir de ahí vamos a seguir informando de nuestros pasos. Al subir al autobús o al metro, continuamos informando. Esa información, que en este caso es necesaria, tiene distintos niveles y destinatarios.
Categorías: CAJÓN DE SASTRE

0 comentarios

Deja una respuesta

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.